Oculto, pero
no tanto como la raíz de un árbol
Visible,
pero no tanto como un tronco con grandes ramas elevadas a lo alto
Necesario…
pero no tanto como el frondoso follaje del árbol
que da
abrigo a las aves y sirve de refugio a las ardillas
No soy árbol
pero hoy, quisiera serlo
Ya no hay
árboles como los de antaño
ahora crecen
solos y separados
…aislados en
algún rincón de un parque
o junto a un
poste de luz en una transitada calle
Tampoco los
niños se cuelgan en ellos como antes
Ahora se
dibujan árboles en cuadernos o en algunas
paredes de ladrillos en la calle para
disimular el espanto
¡No!, ya no
hay árboles como antaño, ahora se les tuercen las ramas y no miran a lo alto
Ya no hay
espacios como en el pasado, ni jardines, ni hermosos prados
solo se ven
en postales o en reportajes de la National Geographic
No es tiempo
de ir al parque, ahora hay demasiados delincuentes y malandros
Mejor te
dejo el teclado, el celular y la Tablet Android para que te distraigas un buen
rato
¡No!, ya no
hay árboles como antaño, que hablaban un solo idioma en primavera, invierno,
otoño o verano
Ya no hay
espacios para volar papagayos, o para romperse las rodillas patinando…
Ya nadie
quiere ser un árbol…
quieren ser
ingeniero, quizás doctor o abogado…., menos un árbol.
Básico y
elemental, pero no tanto como esos que no sueñan y que jamás se han imaginado
que son un árbol, de esos que hablan y tienen ramas como brazos
Adulto, pero
no viejo…
Sigo siendo
un niño aunque me tilden de inmaduro o de necio
Sigo volando
papagayos y recordando los árboles del pasado
Aquellos
junto a los que crecí, con los que jugaba y fui feliz
Con los que
siempre fui niño, aunque fuésemos pobres, aunque nos faltaran lápices de
colores, pero felices jugando entre ellos, el barro y las flores
¡No!, ahora
ya no hay jardines llenos de árboles, ni sonrisas tan alegres como las de otros
tiempos
Ya no hay
patines, ni barquitos de papel o muñequitos de plástico
Ya no veo
niñas con trenzas en sus cabellos amarradas con los cordones de los zapatos
¡No!, ya no
veo niños como los de ayer, que eran niños, eso, nada más…
Ahora saben
más que nosotros
Le hemos
robado esa sonrisa sincera, pura, ingenua…
Ya no
sembramos árboles para ellos,
Les
conducimos apresurados hacia un futuro promisorio y destacado.
Y yo,
soñador como siempre, aquí sentado solo en el
parque dándole cotufas o maíz a
las palomas, esperando ver a lo lejos algunos niños jugando.
¡No!, ya no
hay árboles como los de antaño… No me disgustan los niños de ahora…Tampoco veo
nada malo…
Es que estoy
muy viejo, y a veces se me sale el niño travieso y egoísta que llevo por dentro
y que quiere volver al pasado.
¡Si¡, viejo,
pero no tanto…
En fin, hoy
estoy nostálgico y desanimado
Solo espero
poder descansar algún día, bajo la sombra de
un gran árbol, como aquellos, como
los de antaño.
Carivano
2014
Reservados
los derechos de autor
Imagen de la
Red.
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